"Es el primer vínculo profesional con el Club y es un orgullo enorme. Vélez me abrió las puertas desde el primer día que llegué y voy a estar siempre agradecido", explica este volante de 17 años nacido un 9 de febrero de 2004. 

Integrante de la Sexta División, en el pasado vistió los colores de la Selección Juvenil Sub 15 en un certamen amistoso que se disputó en Croacia y formó parte del Sudamericano de la Categoría en Paraguay durante noviembre 2019. La cinta de capitán ilustró aún más su paso por el representativo nacional.

Hoy en día integró el banco de suplentes en la victoria 1-0 ante Gimnasia en Reserva, divisional en la que aún no tuvo su debut. Sin dudas hubiera sido el día perfecto de haberse producido ese estreno, pero de ninguna impide que sea una "jornada completísima e inolvidable" como él mismo define.

Nacido en Vicente López y residente en Liniers, casi en su límite con Mataderos. Mientras esboza esa sonrisa elocuente que describe lo que vive, sus padres Adrián y Vanesa, junto al pequeño hermano Joaquín, lo observan orgullosos con ojos de amor. "A ellos le debo todo", repite más de una vez y les devuelve la mirada correspondida en sentimiento.

Su ficha técnica dice que pesa 66 kg. repartidos en su 1,78 m. de altura. Cuando llegó a Vélez en octubre de 2011, de la mano de Guillermo Compton Hall, Seoane era un rubio menudito. Fue creciendo y además de jugar en el Fútbol Infantil, completó la tira de baby fútbol en el Club Villareal (de donde arribó a La Fábrica), luego en el club Ideal de Lugano, Villa Luro Norte y Amigos de Villa Luro. Siempre como mediocampista mixto. 

A propósito de sus condiciones, Mateo juega al fútbol como habla: muy bien, pausado pero seguro, criterioso y con variedad de recursos. Es cerebral en sus decisiónes cuando se desempeña como volante por derecha o doble cinco. Piensa y hace jugar a una División que se mueve al compás de esa pierna derecha repleta de talento. No le gustan las comparaciones, pero remarca que en "Vélez muchos formadores me dijeron que les recuerdo a Nico Domínguez. Ojalá pueda seguir sus pasos".

Con la firma de  este nuevo contrato, la Categoría 2004 ya tiene como profesionales a Julián Fernández, Santiago Castro (ambos ya debutaron en Reserva) y ahora al protagonista de esta nota. Abajo siempre hay futbolistas promisorios para ir echando mano y llevarlos de a poco. Mientras tanto, cada cual forja sus sueños y Mateo tiene el suyo: "espero dejar una huella en este gran Club y poder salir campeón".