Los resultados siguen llegando. Las consagraciones en las divisiones inferiores de nuestro vóley se siguen repitiendo. Recordemos que en masculino, Vélez tiene tiras A, B y C. 

Cuando le preguntamos cuáles es el balance realizado luego del campeonato obtenido, Pablo Puerta respondió: “Ver a los chicos festejar, abrazarse después de tanto esfuerzo genera la sensación de haber logrado el primer objetivo planteado. Tengo un grupo muy comprometido, en el que los jugadores no faltan nunca a entrenar. Además, es un grupo muy unido. Nuestro capitán perdió la titularidad y era el primero bancando a los que les tocaba estar adentro. Así son todos”. También se refirió a la importancia que tienen los resultados en las inferiores, al manifestar: “El lograr resultados en inferiores va generando una actitud ganadora. Lo que está claro es que no sirve ganar a cualquier costo. Los jugadores deben llegar con la mayor cantidad de herramientas para poder dar el salto”.

En tanto, sobre los objetivos que se aproximan declaró: “Para la segunda parte del año nos jugaremos el ascenso. Depende de todas las categorías y terminamos bien posicionados. Pero es duro. Por otro lado, tenemos un viaje para la categoría a Necochea. Esperemos que se pueda dar”. Por último, nos dejó una reflexión personal: “Los logros son muy lindos, pero son efímeros, hay que festejarlos y disfrutar, pero también dar vuelta la página y buscar nuevos objetivos. Eso estamos buscando. No conformarnos e ir por más”.

“Lo grupal siempre le gana a la individualidad”

También el capitán del equipo, Juan Cruz Ottaviani, respondió sobre qué siente de este logro. “Fue una sensación hermosa ya que no es algo individual. Fue un premio que conseguimos en grupo, tanto los jugadores como todos los familiares que nos apoyaron a lo largo de las fechas hasta llegar a levantar la copa”, señaló. Sobre cuál cree que fue la clave del éxito, contestó: “La clave del campeonato a mi parecer fue mantenernos siempre unidos como grupo y como equipo, además de no retroceder, aunque nos metieran presión y siempre ir a buscar cada partido con todo”. Finalmente, dejó una gran reflexión personal: “Yo diría que nunca hay que perder la fe, por más que estés último. Porque nunca sabés lo que se viene y el grupo hermoso que se forma es clave. Lo grupal le gana a cualquier individualidad. Es el sentimiento más lindo, diría que es hasta mágico, conseguir algo con gente que te llevás bien. Estamos sumamente orgullosos de todo lo que logramos y de cómo nos estamos desenvolviendo”.