El dolor de algunas ausencias, persiste. Pero queda el recuerdo hermoso entre aquellos que transitaron a esas personas. Hablar de Osvaldo Pascual Rao, es sinónimo de Vélez Sarsfield. Locutor, Periodista y un apasionado por el Club de sus amores. Hoy su apellido continúa en el éter, los lunes por AM 610 Radio General San Martín. Pero un día empezó el camino y bien merece ser recordado en detalle.

En 1968, Osvaldo se inició en radio con Juan Mandel y Edgardo Gilabert, cada fin de semana hablando del Fortín. Eran tiempos de una expansión increíble de la radiofonía. De inmediato, pasó a ser colaborador en Prensa del Club y un llamado especial de Don Pepe Amalfitani lo convocó para jerarquizar aún más el área, dado que hasta ese entonces las funciones periodísticas eran coordinadas habitualmente por un directivo que no necesariamente era una persona del medio.

Sin duda alguna que 1968 fue un año especial para la Institución, sobre todo por el primer título conseguido en diciembre de aquel año. Por ese entonces, Osvaldo se sumó a la revista El Malón, donde firmaba con el seudónimo "El Fantasma de la Torre 2", en referencia a las construcciones en donde se albergaba a las transmisiones radiales y que además eran un hermoso ornamento del Estadio. En septiembre, surgió el primer número de su primogénita publicación: El Fortín de Vélez, una revista que hoy, a 53 años de su nacimiento, continúa saliendo gracias al esfuerzo de su esposa e hijos: Alicia, Osvaldo Christian, Mariano y Lucas.

La inconfundible voz de este enorme locutor, continuó por Radio del Pueblo, Radio Buenos Aires y Radio Antártida; siempre donde jugara el primer equipo. Hasta que en 1992, El Fortín de Vélez se extendió en formato de tira diaria a través de la FM Convivencia 88.1 MHZ. Allí, Osvaldo comenzó con un historia que hoy también continúa firme gracias a sus hijos, pero en ese entonces lo acompañaron Juan Carlos "Profe" Pellegrini, Marcelos Palacios, Pablo Fucci y Marcelo Giovaninni. En 1993 fue el tiempo de la pantalla grande. Así el EFV pasó a ser una sana costumbre en Cablevisión con su programa semanal hasta 2001. 

"Siempre me dijo que tuviera cuidado con el micrófono, que es un arma que puede dañar a las personas; que uno puede decir que un futbolista jugó mal pero no que es un desastre. O bien que un entrenador puede equivocarse con los cambios pero de ninguna manera afirmar que no sabe absolutamente nada. Nosotros nos criamos delante de cables, micrófonos, en imprentas, radios y estudios de televisión junto a él. Sin duda alguna, papá fue un maestro para sus 3 hijos", recuerda Osvaldo Ch. Rao, uno de los conductores del programa junto a su hermano Mariano.

El legado es inmenso: una profesión, un oficio, un nombre. "Más allá del valor del apellido que nos deja, a mi me pasaron a llamar Osvaldo una vez fallecido él. Debe estar contento allá arriba porque el camino que inició, lo seguimos sus hijos. Y sin dudas estaría orgulloso también de ver la gran cantidad de medios periodísticos que tiene hoy Vélez".

A 20 años de su partida, perdura en la memoria de todos los velezanos su imagen y sobre todo su voz. Osvaldo Pascual Rao, pionero entre los periodistas fortineros y creador de un lema por demás elocuente: "Por un Vélez mejor de lo que somos, y más grande de los pretendemos".