
Junta Histórica
Vélez 8-0 Independiente
El 18 de noviembre de 1945, Vélez goleó a Independiente generando la caída más abultada en su historia, y se desquitó de aquel suceso bochornoso de 1940 cuando El Fortín perdió la categoría por única vez.
El 18 de noviembre de 1945, Vélez goleó a Independiente generando la caída más abultada en su historia, y se desquitó de aquel suceso bochornoso de 1940 cuando El Fortín perdió la categoría por única vez.
Toda historia suele tener una introducción, nudo y desenlace. En 1940 cuando El Fortín descendió por única vez, Atlanta también pugnaba por ese segundo descenso que ya tenía a Chacarita sentenciado. Aquella última fecha, los dos goles de Isidro Lángara para San Lorenzo, decretaron la caída 2-0 de Vélez que tenía un punto más que los bohemios. Sin embargo, sucedió algo inesperado: Atlanta venció 6-4 a un Independiente plagado de figuras que marcaron época, entre ellas de Vicente De la Mata, Juan Carlos Corazzo, José Zorrilla (Arsenio Erico y Antonio Sastre decidieron no jugar ese día), entre otros.
La goleada ante el bicampeón reinante resultó toda una novedad viendo el presente de ambos conjuntos (los de Avellaneda terminaron 2° detrás de Boca). Por supuesto que lo grotesco terminó por imponerse: El equipo de Villa Crespo ganaban 4-0 a los 20 minutos de la etapa inicial y se terminó yendo al descanso con un ¡6-0! inimaginable. Para hacer más "decorosa" la vergüenza, Independiente señaló 4 goles para sellar el resultado final.
El lunes 23 de diciembre, el diario "La Prensa" publicó: "la inesperada facilidad con que el equipo de Atlanta consiguió ponerse en ventaja, pues en poco menos de veinte minutos logró cuatro tantos, restó todo atractivo a la contienda. La defensa del equipo visitante se desempeñó con evidente desgano, sin asomo de reacción y puede decirse que, con su escasa actividad, contribuyó a la labor efectiva de los ganadores." "Al salir los jugadores de Independiente para reanudar la lucha tras el descanso —continuaba expresando el matutino— el público adicto a Atlanta los aplaudió".
En pos de rubricar lo que ha sido uno de los hechos bochornosos más grandes del fútbol argentino, José Pedro Battagliero pasó, al año siguiente, de Atlanta a Independiente prácticamente sin cargo. Historia sentenciada. El Fortín estuvo tres temporadas en la B y aquella frase de José Amalfitani ("no he venido al funeral de Vélez Sarsfield") tiempo después, comenzó a evidenciarse no solo con la grandeza de su obra, sino con resultados deportivos que marcaron, por caso, la vuelta a Primera en 1943.
Con la sangre en el ojo por lo sucedido 5 años antes, Vélez viviría varios de los compromisos ante los de Avellaneda por aquellos años. No obstante, los dos primeros cotejos entre ambos, luego del retorno a la máxima categoría, fueron para el Rojo (1-0 en 1944 y 2-1 en la fecha 13 de 1945). De todas formas, el 18 de noviembre de 1945, sucedió un hecho relevante pero esta vez dentro de los límites del fair play deportivo: una pepinada por 8-0, ante el Independiente de Erico, De la Mata, Sastre y el ¡propio Battagliero!
Hace 75 años, el triunfo fortinero se vivió como una venganza que resalta entre los 172 cruces en los que se enmarcan ambos conjuntos. De esa forma, comenzó a cerrarse la historia luego de una introducción dolorosa, un nudo que quedó atragantado para toda la vida y un desenlace perfecto que marcó la derrota más abultada de Independiente dentro del profesionalismo.
SINTESIS
Vélez Sarsfield (8): Alberto Martinuzzi; Víctor Curutchet y Blas Angrisano; Eduardo Folgado, José Coccellato y Armando Ovide; Eduardo Heisecke, Osvado Bottini, Salvador Di Bella, Isaac Sciliar y Jorge Cano.
Independiente (0): Antonio Cammarata; Omar Crucci y Antonio Arrigó; Alberto Álvarez, Raúl Leguizamón y José Battagliero; Camilo Cervino, Oscar Sastre, Arsenio Erico, Vicente De La Mata y Reinaldo Mourín.
Árbitro: Osvaldo Cossio
Recaudación: $ 8.910
Goles: Di Bella (5´, 29´, y 73´), Sciliar (11´, 85´ y 90´), Bottini (46´) y Cano (89´).