Noche difícil para el equipo de Emiliano Scocchera. En el cierre de la primera rueda del campeonato, el Fortín recibió a los de Tigre en Liniers con el objetivo de subirse a la cima, pero no pudo frente a rival que fue más y se llevó un triunfo que le sirve para escaparle a la zona del descenso.

Con un estilo particular, apostando al 1vs1 constante y con el arquero como un jugador más para tener superioridad, La Ñata sorprendió a Vélez y lo dominó de entrada. El Fortín buscaba ser intenso en la marca pero no llegaba a recuperar y el visitante tenía las opciones más claras. Cuando promediaba la primera mitad, luego de una presión en mitad de cancha, el Naranja se puso en ventaja. En el cierre del primer tiempo, Vélez iba con más ganas que futsal en busca del empate, pero no lograba lastimar a un equipo que nunca bajó el ritmo.

El complemento empezó con Vélez con una presión alta para tratar de lograr la igualdad, mientras que La Ñata buscaba aprovechar los huecos que provocaba con el arquero sumado en el juego. Tras algunas atajadas de Luka Benyik, llegó el empate. Luego de una buena presión de Juan Telias, Erik Surace aprovechó la asistencia del Caballo y puso el 1-1 con el arco vacío.

El Fortín parecía haber encontrado la fórmula. Unos minutos después, tras otra gran presión y recuperación de Telias lograba dar vuelta el partido. El 8 fortinero dejó mano a mano a Damián Rojas, que esta vez con arquero, definió bajo y convirtió su sexto tanto en el torneo. A pesar de esto, el local no cambiaba su libreto y seguía dominando. Con un gran pase de su último hombre, el arquero, aprovechando la superioridad, quedó solo cerca del área y empató las acciones.

En las jugadas finales, el técnico fortinero buscó con el 5vs4 para lograr la tenencia de la pelota y tratar de llevarse los tres puntos. A falta de 5 segundos Vélez se equivocó y lo pagó muy caro. Luego de un mal movimiento de la jugada en la mitad de la cancha, el Naranja recuperó y antes de que suene la chicharra aprovechó el arco vacío para poner el 3-2 final.

El Fortín cerró la primera rueda con una dura derrota. No solo porque podía haber quedado primero, sino por el momento en el que lo pierde y porque nunca supo cómo enfrentar a un rival que fue superior. Afianzado en puestos de playoffs, solo resta pasar página y enfocarse en la segunda mitad del año, que será más pareja y exigente que la primera.

La próxima semana, Vélez visitará a Country de Banfield con el objetivo de volver al triunfo y de no desviarse del objetivo principal: el ascenso a la máxima categoría.

Gonzalo Butti