El Capitán tuvo la palabra en el terreno de juego, bajando las pulsaciones del encuentro y tratando de poner en palabras el sentimiento propio y de todo el grupo.

El Chiqui se lamentó por los dos puntos que el Fortín dejó en el camino a nada del final, pero se mostró sereno y calmo para defender a un Vélez que sigue en lo más alto de la tabla.

"Estamos bien. Si a nosotros nos decían que si a siete fechas del final íbamos a estar en esta situación, cualquier hincha, dirigente o nosotros mismos, te lo firman porque nos gusta estar ahí. Hay que jugar como hoy, cada uno de los partidos porque van a ser una batalla. La sensación es positiva porque estamos en una situación muy buena", dijo Bouzat.

En un juego muy polémico, Agustín destacó la intención del equipo de jugar todo el tiempo, ante un rival que abusó de la pierna fuerte y de jugar a perder tiempo. "Ya había pasado que dos o tres veces quedaron jugadores de ellos en el suelo y tanto el árbitro como el fútbol argentino necesitan que haya más dinámica, más tiempo de juego neto. Nosotros intentamos imponer eso. El árbitro les avisó a los chicos de Argentinos que si no se levantaban o no apuraban el trámite no los iba a dejar entrar. Cuando es estratégico me parece bien porque hay que favorecer que se juegue el partido".