El presente futbolístico le sonríe a Vélez. Sumó su Cuarta victoria en fila en el reinicio de la Liga Profesional, se posiciona en los puestos de arriba y llega de inmejorable forma al cruce con San Lorenzo el próximo martes por Copa Argentina.

Es así que corren aires de ilusión por Liniers, pese a que falta mucho para el final. Sí, recién se disputó un tercio de la competencia, pero hoy demostró un fútbol de alto vuelo ante Defensa y Justicia que le alegró el fin de semana al hincha Fortinero.

El equipo salió a buscar el triunfo desde el comienzo, sin embargo la falta de precisión le postergó el grito a Braian Romero, Claudio Aquino y Francisco Pizzini en tres opciones claras muy cerca del arco.

Del otro lado, el rival también propuso y con un par de situaciones que generó a partir de capitalizar distintos rebotes supo inquietar. 

El partido se tornó ida y vuelta por momentos, con Vélez pisando más fuerte, y a través de otro contragolpe letal, cómo viene sucediendo últimamente, empezó a abrirse el resultado. De Pizzini para Romero quien partió habilitado rumbo al área; Brian no fue egoísta y habilitó a Thiago Fernández quien entrando por la banda izquierda definió certero, arriba, para el 1-0. Con la sensación de merecer algún gol más, pero también con la certeza de mejorar en zona media y defensa, los jugadores se fueron al descanso muy aplaudidos por Socios e hinchas.

En el complemento, El Fortín volvió a buscar con decisión el arco rival, pero recién después de un par de avances en los que parecía seguir sin poder de fuego, apareció el botín derecho de Claudio Aquino y se terminó el partido literalmente: el volante, haciendo gala de su pegada, primero marcó un golazo desde 30 metros, al ángulo, y luego con un tiro libre al ras de suelo decretó cifras. Dos impactos letales, a los 9 y 13 minutos, para dejar sin respuesta alguna a Defensa y Justicia y desatar la euforia en el José Amalfitani.

Los dirigidos por Gustavo Quinteros se fueron ovacionados producto de estos 10 goles en cuatro encuentros y la valla propia en cero, un momento soñado para encarar lo que viene con gran ilusión.

Ahora será momento de "cambiar el chip" y mentalizarse en Copa Argentina. Porque "este martes cueste lo que cueste, este martes tenemos que ganar", ¡Fortín de mi vida!