Vélez sufrió una sorpresiva derrota en casa ante Plantense, en el primer partido como local del torneo. El Fortín tuvo una buena primera mitad, en la que mereció más que el empate y una baja performance en el complemento. La visita aprovechó al máximo la única llegada clara que dispuso y se llevó los tres puntos.

La primera novedad de la tarde fue el once inicial que presentó Alexander Medina. El entrenador metió mano y mandó a la cancha un equipo más ofensivo que lo que mostró en los encuentros anteriores, porque mantuvo a los habituales tres jugadores más adelantados: Luca Orellano, Lucas Pratto y Lucas Janson, pero le sumó al juvenil Abiel Osorio por delante de ellos.

Esto obligó a reconfirgurar el dibujo táctico, que exigió mas retroceso y despliegue por parte del Oso; pero a esas modificaciones se sumó el retorno de Santi Cáseres a la titularidad junto a Nicolás Garayalde para compartir el eje central. Y la presencia de Leonardo Jara por Tomás Guidara en el lateral derecho.

Le costó a Vélez el primer tiempo, pero pese a eso tuvo varias oportunidades como para ponerse en ventaja. Platense se cerró bien y ocupó el ancho del campo, lo que le impidió al Fortín tener fluidez en el juego. 

A la hora de los méritos, el equipo del Cacique debió irse al descanso con algo más que la igualdad porque siempre se mostró más peligroso y cercano al gol, por eso tuvo sus chances, con Osorio y un remate alto ante la salida del arquero apenas empezó el partido, Janson con un centro de zurda que obligó al esfuerzo de Ledesma para sacarla al córner, Pratto con una gran jugada individual forzó otra vez al 1 a lucirse, Matías De los Santos que ganó en un córner y otra vez el portero calamar evitó la caída. Y la más clara de esa etapa, en los pies de Garayalde, con el arquero en el piso y tras un pase atrás de Janson, remató por arriba al arco.

Pese a tantas situaciones, que no siempre llegaron avaladas por el buen juego, Vélez debió conformarse con la paridad en el entretiempo ante un rival que se cuidó atrás, cerró los caminos y apostó por alguna réplica que nunca tuvo.

En el complemento todo cambió, no por la actitud del local, que siguió buscando con sus herramientas, sino porque desde el primer minuto, Platense salió más decidido a defenderse y ese bloque compacto se volvió un obstáculo imposible de sortear para los de Medina. La falta de frescura en el trámite, las impresiciones y el nerviosismo por el correr del tiempo, hicieron que los avances no encontraran cómo llevar peligro a Ledesma, que sólo debió intervenir en un remate de Pratto desde adentro del área.

Poco para un equipo que tiene otras aspiraciones y ante un rival que elige resguardarse y apostar a alguna contra. Esa única pelota de peligro llegó para el equipo de Vicente López tras un centro cruzado, un cabezazo pasado y el oportunismo de Iván Gómez para ganarle a De los Santos y Lucas Hoyos adentro del área chica. Platense encontró lo que no mereció y ni siquiera pareció decidido a buscar.

A partir del gol, todo fue desconcierto- El equipo se desordenó para buscar la igualdad, los cambios poco le aportaron al funcionamiento y los nervios terminaron de adueñarse de los jugadores del Fortín que mereció más por lo hecho en la primera parte, pero que se quedó sin nada por la impericia que mostró en los minutos finales.

El jueves habrá una rápida revancha ante Racing en Avellaneda, para revertir este arranque errático del torneo y colocar a Vélez más arriba en la tabla. ¡Ojalá así sea!.