Vélez perdió un partido increíble, que lo tuvo en arriba en el marcador a falta de 8 minutos para el final. El equipo de Pellegrino fue empujado por su rival, que lo arrincó a fuerza de garra y sacrificio contra su propio campo.

La temprana ventaja no le sirvió al Fortín para hacerse fuerte y buscar el segundo gol que liquidara el pleito, Banfield pese a sus errores, lo obligó a jugar incómodo y al filo del peligro, Fueron varias las ocasiones que dispuso el local para llegar a la igualdad, algunas desperdiciadas por impericia propia y otras, por las intervenciones de Lucas Hoyos.

Pero de tanto insistir el local encontró la igualdad con un cabezazo letal de Enrique y lo que pareció encaminarse a una igualdad final, terminó siendo el envión anímico que necesitó Banfield para ir por los tres puntos. Y tuvo su premio en el tiempo de descuento, con una joya de Dátolo, que se movió con facilidad en el área y clavó un zurdazo al ángulo. 

El cuarto de hora inicial fue el único momento favorable a Vélez y ahí llegó el gol de Lucero., A los 13 minutos Almada presionó alto, se la robó a Domingo por izquierda, lo vio al Gato cerca de la medialuna y habilitó al centrodelantero, que recibió y con un pequeño movimiento se acomodó para su derecha y sacó un latigazo bajo, lejos del alcance del arquero. Gol, festejo y a extender la racha goleadora del 9.

El conjunto de Liniers fue una sombra de lo que mostró ante Boca, se vio superado y sin reacción. La derrota, dolorosa como todas, cortó un invicto de 12 encuentros y suena como una alarma de cara a la definición del torneo y las posiciones en las tablas, porque más allá del resultado y la forma, se vio desbordado por un equipo que en los papeles es inferior.  Sobre el final hubo reclamos y quejas contra Vigliano, pero el partido se perdió mucho antes y sin ningún atenuante.