Fútbol

“Cuando llegás a Vélez tenés la ilusión de ser campeón”

A diez años del título, el querido Emiliano Papa le puso sentimiento al recuerdo del gran Campeón 2011, de la mano de Ricardo Gareca.

Momento de euforia, festejo de un Vélez Campeón inolvidable.
Por Carlos Martino

Desde la cantidad importante de veces que se puso la camiseta fortinera hasta lo mareado de tanta vuelta olímpica. Sin dudas, Emi Papa ingresa al top de los grandes ídolos de la institución en sus 111 años de grandeza.

El lateral se subió al tren del recuerdo para repasar una de las estrellas más recordadas de la Era Gareca. El Torneo Clausura 2011 fue la confirmación de gloria a un ciclo inolvidable. 

El Fortín venía de ganar el Clausura 2009 y de hacer un campañón en el Apertura 2010, que finalizó con un subcampeonato detrás del Estudiantes del querido Alejandro Sabella, con una cantidad de puntos exorbitante (43 para una segunda plaza).

"Si bien había sido un excelente torneo, nos había quedado un sabor amargo por no haber conseguido el torneo del 2010. El 2011 empezamos con la misma ambición, con las mismas ganas. Sabíamos que íbamos a ser protagonistas como siempre, con un equipo que llevaba bastante tiempo juntos. Encaramos el camino de ese año con muhca ilusión", arrancó el hombre de Acebal.

En ese arranque de un semestre con Libertadores y Clausura, los dirigidos por el Tigre Gareca se mentalizaron en ir por la doble corona. El objetivo de lograr las dos competencias estuvo más cerca que nunca. Algo que parece imposible para cualquier equipo en el país. "Nos queda ese sabor de vacío por la Libertadores, ya que nos quedamos con las ganas de jugar la final habiendo hecho todo para estar ahí. Se pudo pelear en las dos cosas, con formatos que no son como el de ahora y pudimos ser protagonistas en ambas competencias".

Vélez cayó en semifinales en una copa inmejorable e inmediatamente tenía un cruce ante el Tomba por el Clausura que era vital para no perder pisada al sueño de la corona doméstica. "La eliminación con Peñarol fue difícil desde lo deportivo, porque veníamos muy bien. Después hubo otros partidos en los que el equipo marcó que estaba para pelear hasta el final. El partido con Godoy Cruz mostramos la entereza y las ganas de ganarlo; con el dolor de la eliminación, pero con la personalidad y la actitud de saber que teníamos que salir adelante y hacer un gran juego. Fue también inyectar alegría al grupo y sacar esa sensación fea de la eliminación", rememora Papa.

Para él, fue la segunda estrella de varias con la camiseta con la que se destacó en su carrera. Un deseo de siempre, de llegar y triunfar. Un sueño cumplido. "Cuando llegás a un club como Vélez, tenés la ilusión de ser campeón. Se tienen que dar muchas cosas, el grupo, el cuerpo técnico, la dirigencia, la gente, los que trabajan en el club, todo tiene coincidir para lograr un campeonato. Cuando se logra, uno siente la felicidad y la ve reflejada en el hincha, en los compañeros, en todo lo que rodea Vélez que es muy lindo".

Hoy, Emiliano reconoce y destaca la importancia de tocar la gloria en una institución que lo abrazó desde el vamos. Pertenencia aún sin ser del riñón del club. "Salir campeón ahí es algo muy gratificante porque se logra entre todos. Fueron momentos de felicidad a nivel deportivo que uno sueña y siempre se recuerdan".