-¿Cómo vivieron el proceso que les permitió alcanzar la máxima categoría?
-Yo llegué al club este año. Ellas habían perdido la categoría hace dos años y el año pasado quedaron a un punto de jugar a un repechaje para ascender. El proceso consistió este año en plantearse un objetivo y hacer todo lo posible por lograrlo. Ese objetivo era el ascenso. Nos planteamos ser regulares en el torneo, pero sobre todo ser regulares durante los partidos. Desde principio de año fuimos preparando los partidos durante la semana, jugar y después corregir los errores que habíamos cometido el sábado, pensando en el siguiente. El segundo torneo fue casi impecable.
-¿Qué pensás que es lo más destacable de este plantel?
-Lo más destacable fue la responsabilidad y el compromiso con el que las chicas asumieron este año plantearse el objetivo en el primer torneo de pelear el campeonato y en el segundo torneo de pelear el ascenso. Se demostró día a día en los entrenamientos, en los que hubo pocos ausentes, que a veces ocurre, más que nada por algún tipo de lesión, algún trabajo o la facultad, pero después estaban siempre dispuestas a entrenar todo lo que uno les exige. Así, el plantel logró conformarse con unas nueve o diez jugadoras de mayores y unas cuatro o cinco juniors que sumaron. Y mucho en los partidos cuando se necesitaba una rotación y asumieron ese compromiso más que satisfactoriamente.
-¿Qué significa este ascenso para el handball femenino en el club?
-Jugar y haber podido lograr el ascenso a la máxima categoría de Argentina, es un sueño cumplido de muchas de las chicas que sufrieron el descenso y que no habían podido subir apenas bajaron. Eso fue un golpe duro para la mayoría de las mayores. Esto es un sueño y un logro de todo el handball de Vélez. El handball en general, no solo femenino, festejó y eso se reflejó en los partidos. Los chicos y las inferiores fueron a ver todos los partidos en cualquier lado adonde jugaron. Ese apoyo las chicas lo sintieron y por eso creo que es un logro más que merecido para este grupo de chicas que la viene luchando desde hace muchos años y que logró ahora volver a la máxima categoría, de donde no tendría que haber bajado, pero por cosas que a veces pasan, por lesiones, la partida de alguna jugadora y demás, suceden. Este año se logró conformar un grupo bastante sólido, por suerte se cumplió el objetivo y el sueño de todo el handball de Vélez.
-¿Qué expectativas tienen de acá al futuro?
-La expectativa es mantenernos bien arriba e ir sumando más experiencia con las más chicas que están jugando en el plantel de mayores y que ya el año que viene, algunas suben a Mayores. Todavía no lo hablamos, seguimos festejando el ascenso, pero cuando uno logra un ascenso el primer objetivo que uno se plantea sin hablarlo, es mantenerlo. Mantener la categoría, es algo un poco más complicado pero yo creo que lo podemos lograr tranquilamente, ese sería el objetivo y la expectativa que tenemos todos de cara al futuro, seguir sumando o tratar de clasificar a algún torneo, pero principalmente mantenernos en la categoría lo mas que se pueda, la cantidad de años que se pueda y no bajar más.
Foto vía Facebook @VelezHanball
Nadia Yanina Domínguez