Todo pibe que juega al fútbol sueña con salir Campeón y automáticamente uno piensa en las grandes ligas. Pero no, la primera reminiscencia a coronar una vuelta olímpica es en Inferiores. Allí, en el espacio donde todo comienza a cobrar forma, se van gestando camadas y el anhelo es el mismo: competir, para formarse como jugador y persona y por supuesto, ganar.

En la cantera la cantera fortinera, la 2002 fue creciendo entre dos Categorías que tienen mejor material técnico: la 2001 de Thiago Almada y compañía y la 2003, que juega un fútbol divino y ya tres de sus integrantes (Máximo Perrone, Elías Cabrera e Isaías Andrada) firmaron su primer contrato profesional. Entre las dos se repartieron los últimos títulos de Vélez en Inferiores. Pero ahora, a dos fechas de culminar la etapa clasificatoria de la Superliga Juvenil del segundo semestre, la 2002 (Sexta División) es la primera que accede a las Semifinales tras una campaña brillante: liderazgo absoluto de la Zona A con 10 triunfos, un empate y una caída. Un equipo sólido, donde el rendimiento individual se subordina a lo colectivo, le permitió a los dirigidos por Juan José Griecco meterse entre los cuatro mejores equipos en busca del título.

Tras dos fines de semana sin partidos (Día de la Madre y Elecciones Generales), la Sexta aguarda por volver a la competencia cuando el próximo sábado reciban a Aldosivi en la Villa Olímpica. Alexandro Benítez (3/2/2002 en San Martín, Bs As), una de las figuras en la última victoria 4-2 ante Boca, se metió de lleno en el mejor momento que están viviendo.

-¿Imaginaban este gran año?

-Estamos muy contentos por cómo está el plantel. Siempre supimos que tenemos un equipo que puede pelear cualquier cosa. Estábamos convencidos de lo que veníamos haciendo y el primer objetivo ya está cumplido, no tenemos que aflojar y ahora a meterle más que nunca. Estamos seguros de nuestra idea y nuestro juego, y toque quien toque en Semifinales sabemos que tenemos todas las herramientas para jugarle de igual a igual a cualquier equipo.

-¿Qué cambió en el equipo desde la llegada de Pepe Griecco como entrenador?

-Creo que nos cambió la forma de jugar, es todo mucho más exigente a lo que veníamos haciendo. Pepe tiene una forma de juego que no todos los entrenadores proponen, siempre nos brinda la mejor herramienta posible para que nosotros lleguemos de la mejor forma al fin de semana. Nos pide mucha movilidad y circulación rápida, mover al rival para que encontrar los espacios, y a la hora de recuperar, hacer una presión grupal e intensa sin dejar jugar al contrario.

-¿Y en lo personal cómo te estás sintiendo? Como premio a tu desempeño, lograste portar la cinta de Capitán.

- Con el presente me siento muy bien y muy cómodo, creo que están viniendo cosas buenas y no quiero aflojar. Ser uno de los Capitanes del equipo significa mucho para mí porque siempre voy al frente, aliento a mis compañeros en todo tipo de momentos, y especialmente busco que sigamos creciendo como equipo.

La trayectoria de Alexandro en Vélez comenzó hace 9 años luego de que lo vieron jugar un torneo en su barrio (Puerta 8, Partido de 3 de Febrero) y de ahí, prueba y confirmación. En Infantiles sumó valiosos minutos pero desde que la 2002 entró en Juveniles, le costó jugar en AFA pero se fue haciendo fuerte en Liga Metropolitana. Este diestro de tranco largo y mucha intensidad en el despliegue, nunca lo bajó los brazos cuando era volante por izquierda y hoy se erige protagonista en la línea media de un equipo que va por más.

-¿Qué lograste cambiar en vos para volver a ser tenido en cuenta?

- Era cuestión de insistir y ser paciente, yo sabía que en algún momento iba a tener mi posibilidad y tenía que aprovecharla. También por mi mamá, ella me da la fuerza día a día para que yo siga adelante y nunca me caiga. Pero bueno, no debo quedarme con eso. Como jugador creo que tengo muchas cosas para aprender y mejorar aún, de a poco voy aprendiendo muchas cosas nuevas. Y como persona trato de dar siempre lo mejor de mí y tener buen humor con todos.

-¿Qué significa Vélez en tu vida?

-Mi vida, es el club que siempre me brindo todo desde el día que llegué, espero llegar a devolverle algo por todo lo que me brinda.